Su presidente, Adolfo Utor, califica de «lento» el despliegue de las ayudas a los armadores que prometió el ministerio de Transportes
El presidente de Baleària, Adolfo Utor, durante la presentación oficial del ferry ‘Margarita Salas’ en el puerto de Barcelona | O.M.
Òscar Mateu Barcelona
12 de diciembre de 2024
La naviera Baleària se ha reafirmado en el proyecto que planteó para operar la línea entre Tarifa y Tánger Ville (Marruecos), cuya licitación ganó recientemente. Su presidente, Adolfo Utor, ha salido al paso de las dudas que sembró en contra de dicho plan una de las competidoras en el concurso, FRS Iberia-Maroc (DFDS), al cuestionar que Baleària dispusiera de la autorización pertinente para desplegar en el puerto marroquí la infraestructura de carga que necesitarán los ferries que empleará en la ruta. “Ya tenemos ese permiso, y además lo tenemos desde el principio”, ha señalado el dirigente del armador con sede en Dénia (Alicante) durante la presentación de uno de sus últimos buques, el ‘Margarita Salas’. “Hemos diseñado cargas de baterías tanto en el puerto de Tánger, con la empresa Leolia, como en Tarifa, con Endesa, para los dos ferries que usaremos. Eso es un hecho”, ha explicado Utor.
“Nuestro modelo para la línea Algeciras-Tánger es técnicamente perfecto”
Adolfo Utor Presidente de Baleària
Baleària se impuso a la filial de DFDS y a una tercera empresa, Sercomisa, en un concurso que la Autoridad Portuaria de Algeciras lanzó para generar una “línea verde” entre Tarifa y el recinto marroquí, dentro de su plan para descarbonizar los tráficos del Estrecho de Gibraltar. Hasta entonces, era FRS quien venía operando la ruta, que Algeciras habilita mediante la concesión del atraque correspondiente en el puerto de Tarifa. La naviera de Utor habría presentado una oferta económicamente más atractiva que sus dos competidoras, basada en la operativa de dos ferries a propulsión eléctrica y el correspondiente despliegue de infraestructura. Tras la adjudicación, DFDS amagó con recurrir el concurso, aunque primero quería esperar a que Baleària presentara la documentación de su propuesta ante la autoridad portuaria algecireña.
Cuestionado por esta publicación, Adolfo Utor ha argumentado que “el que pierde siempre tiene una justificación para perder”, antes de añadir que “tienen todo el derecho a cuestionar nuestro modelo, pero nuestro modelo, desde nuestro punto de vista, es técnicamente perfecto. El tiempo lo dirá”. Asimismo, el presidente de Baleària ha señalado que el contrato para la construcción de los dos ferries está “a punto” de firmarse, y se ha mostrado confiado en que “en dos años, los dos buques estarán trabajando. No tengo ninguna duda”. También ha puesto en cuestión que un hipotético recurso de DFDS llegara a prosperar: “No estamos nerviosos”, ha añadido al respecto.
Baleària prevé incorporar un tercer buque de la generación del ‘Margarita Salas’
Durante la presentación del ‘Margarita Salas’ en el puerto de Barcelona, Adolfo Utor ha reivindicado la vocación de “operador local” de Baleària, elemento que también puso en valor en el marco del concurso por la línea de Tarifa. “Cuando hay problemas y nos necesita quien sea, saben que yo estoy al otro lado del teléfono. En situaciones de necesidad, tener una empresa local capaz de responder ante necesidades logísticas, no es lo mismo que tener que llamar a Ginebra o a Copenhague”, ha manifestado el presidente de la compañía marítima. Su discurso se enmarcaba en la relación que ha establecido Baleària con el puerto de Barcelona, donde ha señalado que la naviera ha sido la responsable del 80% del Gas Natural Licuado (GNL) que se suministra mediante bunkering este año. Asimismo, el dirigente del grupo armador también ha avanzado que prevé incorporar a su flota un tercer buque tipo fast-ferry de propulsión dual, es decir, de la misma generación que el ‘Margarita Salas’ (botado en diciembre de 2023) y su hasta ahora único gemelo, el ‘Eleanor Roosevelt’.
LA LLEGADA DE LAS AYUDAS AL TRANSPORTE MARÍTIMO ES “LENTA”
El presidente de Baleària, Adolfo Utor, ha calificado de “lento” el proceso para dotar a los armadores españoles de las ayudas que les prometió el ministerio de Transportes en aras de descarbonizarse y renovar sus flotas. Utor ha trasladado que hay “pocas novedades” sobre el devenir de las subvenciones. “Son lentos, y desgraciadamente los países con los que competimos son rápidos”, ha lamentado. Un argumento común del sector naviero español para reclamar esas líneas de apoyo es el trato que, a su juicio, reciben sus homólogos en países vecinos como Francia o Italia, que compiten en mercados similares. Así, no obstante, el propietario de Baleària ha “confiado” en que “en algún momento tendremos esas líneas para poder crecer”, junto con los avales para construir nuevos buques, un fondo de créditos que el ministerio de Óscar Puente cuantificó en su momento en 1.000 millones de euros. “Pero de momento resistimos, todos nuestros buques los construimos contra nuestro propio patrimonio”, ha manifestado.